El número de divorcios crece tras el verano
El verano puede sentar mal a las relaciones. Desde que se legalizara el divorcio en el año 1981 las rupturas aumentan cada año y, sobre todo, después de verano o de cualquier época vacacional. Parece ser que pasar mucho tiempo con la pareja no le sienta bien a todo el mundo.
Y no es algo que digamos nosotros, que también vemos como en nuestro bufete aumentan los casos en esta época, sino lo dicen las estadísticas.Durante el verano se deciden el 33% de las separaciones y uno de cada tres divorcios se produce en el mes de septiembre.
Nuestra sociedad ha cambiado mucho con respecto a nuestros antepasados y es verdad que somos una sociedad donde el matrimonio se ha convertido en un producto más: me caso “para toda la vida” pero si no me siento bien, decimos adiós e intentamos buscar otra pareja. Como se suele decir de manera coloquial hoy en día tenemos menos aguante y no dejamos pasar nada. Quizás ésta sea una de las principales claves.
Y precisamente porque en verano pasamos más tiempo con nuestra pareja es una época perfecta para sacar a relucir esas rencillas que teníamos clavadas durante el resto del año. Al final la relación estalla y se produce el conflicto.
Cada divorcio es único y debe ser la última opción para poner fin al matrimonio. Hasta llegar aquí hay muchos medios como puede ser la mediación. Lo primero es empatizar y ponerse en el lugar del otro. Igual así somos más consciente de cómo se puede sentir nuestra pareja.
Si no hay solución, lo mejor siempre es hacer algo en el que los dos salgáis ganando. Si el divorcio es la solución habrá que hacerlo. Algo necesario durante el proceso de divorcio es buscar un buen abogado.
En Gallardo abogados somos expertos en este tema y siempre que lo necesites puedes llamarnos y buscaremos la mejor opción.